Mi hermana, mi ama (9)

Llevaba un buen rato estudiando y ya notaba que mi cabeza dejaba de pensar en la termodinámica para recordar como los pechitos de mi hermana brillaban a causa de la leche que tenia y mi saliva, en uno de mis descuidos baje la cabeza y vi mi cuerpo desnudo con los pezones bien erectos, y puedo asegurar que no era por el frio, me pasaba el bolígrafo por los labios, me lo acerque a las tetas con cuidado de no mancharme me rodeé el pezón con la tapa, en eso que entró Cris ya vestida para la fiesta, con un vestido blanco súper ajustado con un cinturón negro y ancho alrededor de su cintura:

-Vamos Ta… ¿Qué haces? , dijo orgullosa.

-Nada ama, solo me despiste un poco, no estoy acostumbrada a estudiar desnuda, no lo tenía planeado pero la excusa me quedó muy bien.

-Jaja, bueno si te gusta jugar con bolis, se inclino hacia la silla y me cogió el bolígrafo que tenía en mi boca, date la vuelta.

Noté como escribía algo por mi espalda, cerré los ojos y me concentre en los trazados del bolígrafo, cuando acabo me pregunto -¿Qué he escrito?

-¿Puta de Cris?, dije flojito.

-Muy bien, dijo acariciándome la cabecita como a una perra, toma, me puso una camiseta suya que a ella le queda genial, pero a mí no me tapa el ombligo y mis pechos se ven tan apretados que aun sin estar excitada se me marcaban los pezones y aun más si no llevaba sujetador.

Me pasó la mano por las tetas, -Hoy vas a calentar a más de uno, me agarró un pezón y lo retorció, quiero que te asegures que durante toda la noche se te marquen bien esos maravillosos botoncitos.

-Si ama, pero por favor ¿podrías borrarme lo de la espalda?, no ves que podrían pillarnos.

-Mira niña, me cogió la barbilla y me la alzó, dos cosas, con esas tetas ¿crees que alguien mirara tu espalda?, y dos eres mi puta y si quiero que la gente lo sepa, pues lo sabrá.

-Perdón ama, ¿Qué tendré que hacer en la fiesta?

-Jaja, te lo contaré de camino, ponte esa faldita tuya que tanto me gusta, y algún tanguita sexy.

-¿La lila?

-Sí, me dijo mientras miraba como rebuscaba en el armario, mira si te inclinas mucho se ve algo de lo que escribí jaja.

Me baje un poco la camiseta y seguí buscando, me puse la minifalda y un tanga.

-Cris, nos pueden pillar, al menos déjame ponerme una camiseta más larga.

-Que no coño, me levanto la mano, ¿vale?

-Sí ama, me puse unos zapatos de tacón, ¿nos vamos ya?

-Sí vamos, o llegaremos tarde, me hizo ir delante de ella a cachetadas en el culo.

Cogí las llaves del coche pero me las hizo dejar, iríamos a pie, en el ascensor me explico que  no era una fiesta del todo, sino solo unos amigos en casa de uno en plan tranquilo, -Todos menos tu y yo serán chicos, me explicó.

-¿Qué tengo que hacer, y en voz baja por miedo a que alguien por la calle nos oyeran, ama?

-Recuerdas esos 6 o 7 chicos que mientras dormías…, pues serán esos y unos cuantos más, y les he prometido que se la mamaría a uno.

-¿A quién?, dije algo preocupada.

-No lo sé a uno, jaja, ahora te explico, les he dicho que tú con unas copas te vuelves muy puta y les he prometido que si te emborrachaban se la mamaras, y quiero ver quien la tiene más grande y más llena de leche, jeje.

-Vamos que voy a tener que mamar muchas pollas para que unos tíos intenten impresionarte, ¿no?

-Que lista es mi perrita, al decir eso una señora se giro y nos miro rara y Cris se echo a reír.

Llamamos al portero automático.

-Soy yo Cris, y vengo con mi hermana, se escuchaba gente cuchichear.

-Pasad, abrió.

Entramos en un ascensor, Cris saco una petaca de su bolso.

-Toma, bebe un poco que en teoría vienes borracha de casa.

-¿Cris de dónde has sacado eso?

-Calla y bebe, mientras bebía me levanto la camiseta y empezó a comerme las tetas, vamos poneros duros, decía mientras mordía mis pezones, llegamos al piso y rápido me bajó la camiseta.

Me apoye sobre sus hombros, como si me costara caminar.

-Muy bien perrita, me metió los dedos bajo la falda, y luego llamó a la puerta con la misma mano.

Abrió la puerta un chico que me sonaba mucho, -Hola Cris, le dio dos besos, ¿Tamara te acuerdas de mí?, me beso a mi también.

-Sé, pero no se tu noombreee, jeje.

-¿Joder ya va borracha? Le preguntó a Cris.

-Borracha y salida como una mona, que viniendo para aquí se iba pellizcando los pezones jaja.

-Ssssh, le dije riéndome y abrazándola, no le digas nada, le di un beso en las mejillas.

-Ves, como una cuba jaja, susurrando les dijo, tiene un hambre de polla jaja.

-Pasa Tamara pasa por favor.

Había unos 20 chicos todos mirando mi apretada camiseta, me sentía violada solo viendo como me miraban.

-Hola chicos, dije saludando de forma coqueta, dirigiéndome a Cris le dije, me dijiste que habría chicos de mi edad, jopetas estos no se la dejan mamar.

-¡Tamara!, calla.

Se escuchaba como los chicos decían cosas de mí, me llamaban puta, facilona, chupa pollas. Pero a mí me daba igual, eso me excitaba. –Bueno Cris, como aquí no voy a conseguir nada, casi que me voy a un bar a, bueno ya sabes.

Un chico riéndose dijo, ¿quiere mamar la putita?

Me giré, no sabía quién me lo dijo, -Quien lo haya dicho que se la saque, vamos.

Todos se reían, incluso Cristina, se acerco hacia mí un chico que me sacaba un palmo de alto, me arrodille delante de él, y le empecé a desabrochar la bragueta. Para tener 14 o 15 años la tenia grande y gordita, pero no es de las más grandes que he visto. Me pase el capullo por los labios. El chico gemía, aun no tenía su polla en mi boca que ya gemía, jeje se me escapaba la risa. Me agarro del pelo y me pregunto de qué me reía.

-Como se nota que eres un crio, aun no te he tocado y ya estas gimiendo, no voy a tardar mucho.

Los chicos se reían de él, el se enfado y me dijo, tu a mamar que es para lo único que sirves. Eso me enfado algo, así que me esforcé el doble para que se corriera antes,  con una mano le masajeaba los huevos y de un solo empujón me la clavé hasta la garganta, mientras la tenía dentro jugaba con la lengua, y en menos de dos minutos se corrió en mi boca, no le di tiempo ni a quitármela de la boca. Me la trague sin asquearme, y sonriendo dije,-¿Alguien que dure más por favor?

Todos se callaron, y se miraban los unos a los otros.

-Tranquilo chicos que no muerdo, a no ser que me lo pidáis, jeje, veía como Cris estaba sentada en n sofá y asentía con la cabeza orgullosa.

Se acercó otro chico, vamos ven, me dijo señalándose el paquete.  A gatas me acerque a él y le saqué la polla por la bragueta, era más o menos normal y estaba muy dura.

-Trátame con cuidado, que soy nuevo en esto.

Empecé a besarle el capullo, con delicadeza, me metí media polla en la boca. Luego bajé un  poco más. En menos de un minuto soltó un quejido, me apartó rápido y un chorro de leche salpico mi cara. Cris tampoco se aguantaba la risa.

-Vamos chicos como sigáis así en 10 minutos acabo con todos, yo no apartaba la mirada de Cris, estaba con un chico hablando.

Los 5 primeros chicos se corrieron en menos de 3 minutos, más de uno se corrió en mi cara, el sexto se me acercó y me dijo, tranquila niña que yo duro más, pero podrías quitarte la camiseta, que así me pones más.

-Eeemm no, Cris me miraba riéndose, el chico empezó a tirar de mi camiseta hasta quitármela, ¡noo!, mierda ahora todos sabrían lo que Cris me escribió en la espalda pensé, pero no paso nada, Cris me miró y pude leer sus labios creo que susurró PUTA TONTA. Me había engañado, yo muerta de miedo y ella muriéndose de risa, era mala pero yo en ese mismo momento estaba empapada, cuando me quise dar cuenta tenía una polla golpeándome los mofletes.

-Va puta, chúpamela ya.

-Sí, ahora voy, me la metí en la boca, era un pene corto pero gordito, me lo pasaba por las paredes de los moflete, el chico me aguanto un buen rato hasta que empezó a gemir.

-Aaamm, aguanta dijo, se la saco de mi boca, yo la abrí y se corrió en mi boca, un enorme chorro de leche me cayó en la boca y en la barbillas resbalando hasta mis tetas. Joder con la hermana guarra, dijo  riéndose mientras se alejaba de mi fardando.

Fueron viniendo tíos y corriéndose por todo mi cuerpo, algunos mejores que otros pero el que más me gusto duro unos 10 minutos, se corrió como una fuente sobre mi cara.

-¿No queda nadie más? Jopetas.

-Sí, dijo Cris al chico de su lado, quedas tú Nacho.

Era un chico bajito, delgado, pelo larguito y castaño.

-No Cris ya te dije que a mí esto no me iba.

Me acerque a 4 patas dejando tras de mí un rastro de semen, -Vamos, te va a gustar y tampoco tardaré tanto.

-Lo siento mucho pero no, dijo muy tímido con la voz entrecortada.

Me puse de pie, y me quité la falda y el tanga, me senté sobre su regazó restregándome, -Vamos si ya estas empalmado, si al llegar a casa te vas a matar a pajas, ¿por qué no dejas que te haga yo una bien hecha con la boca?

-V… Vale.

Le bajé el pantalón y le saque una enorme polla, aparte de gorda era larga, Cris se quedo tan sorprendida como yo, al ver como la tenía su tímido amigo. Al ver que era amigo de mi hermana lo quise tratar mejor que a los demás, le mordisqueé el capullo, mientras le veía la cara de satisfacción, me la metí en la boca y empecé a bajar, me costaba tragármela quizás era la segunda polla más grande que me había metido en mi boca. No conseguí metérmela toda de golpe, me la tuve que sacar de la boca, y volver a intentar, esta vez me la metí hasta la garganta, el chico disfrutaba, pero no gemía tanto como los demás. Empecé a preguntarme si hacia algo mal, empecé a tragar y tragar, pero no se corría, además mi cuello estaba algo resentido. Tarde casi media hora en conseguir que se corriera en mi boca, se corrió tanto que me salía entre los lados.

-Perdón, dijo el chico.

-No pasa nada cariño, le dije recogiendo el semen que salía de mi boca y metiéndomelo de nuevo, estoy agotada.

Alguien de lejos dijo, y mojada so-puta.

Cris se acerco a mí y me susurró al oído, acompáñanos a Nacho y a mí a la habitación.

Me levanté, y les acompañé. El chico aunque nervioso estaba empalmado de nuevo. Nos encerramos en una habitación.

Cris rápidamente se desnudó, se acercó a mí, me abrazo y empezó a besarme saboreando el semen que quedaba en mi piel. El chico estaba sentado sobre la cama, flipando.

-Cris, no sabía que fueras tan…

-¿Tan puta?, dijo ella.

-Bueno si, pero ¿por qué?

-Me encanta la leche jeje, dijo ella  lamiéndome un moflete, a mi me hacia cosquillas, no se lo digas a nadie, ¿vale?

-No tranquila, ¿pero tú has hecho muchas mamadas?

-Sí, me enseño mi hermanita, ¿te hago una yo y comparas?

-Sí Cris yo siempre he estado enamorado de ti, por favor hazme lo que quieras.

Cristina se puso de rodillas entre sus piernas, aso la lengua por todo su pene.

-¿Sabes cuantas noches me he masturbado pensando en tu boquita?, le dijo mientras le acariciaba la cabeza.

Cris se metió una parte del pene en su boca y empezó a succionarlo, mientras bajaba y subía su cabecita. Podía ver cómo le llenaba la polla de babas, aunque no se la metía muy adentro pero lo hacía bien. Fue variando la técnica  hasta que el chico le empezó a avisar que se correría, Cris se apartó mientras le masturbaba con la mano con el capullo apuntando  a su boca hasta recibir un chorro de leche caliente.

-Mmmm, decía Cris relamiéndose. ¿Quien la chupa mejor?

-Emmm, las dos lo hacéis muy bien, yo me enfadé un poco, bueno mm supongo que tu Cris.

Cris se giro burlándose, -jaja, la mamo mejor que tú.

-Mentirosa, yo la mamo mejor, lo que pasa que después de mamar 20 pollas pues cuesta.

-Sin excusas, bueno Tamara, nosotras nos iremos.

-¿Ya?, dijo el chico disgustado, ¿no podéis hacer algo mas por mi?

-No dijo Cris, va Tamara recoge tu ropa del salón y vámonos a casa, me dijo mientras vestía.

Salí, recogí mi camiseta manchada de semen y  la minifalda, me los puse.

-¿Me podéis devolver el tanga?

-jajaja, no recuerdo de la noche.

-Pero a ver sois 20 chicos y solo un tanga, ¿podéis devolvérmelo?

-Que no puta.

Volví a la habitación y me fui con Cris de esa casa. En el ascensor se acerco a mí, y empezó a olerme, hoy duermes así, me dijo, me encanta este olor a puta.

-Cris me duele un poco la tripa.

-Jaja, has tragado mucho semen pero bueno ahora al llegar a casa te compenso.

Como era tarde no nos vio nadie por la calle, al llegar a casa nos desnudamos y nos metimos en la cama de nuestros padres. Ella me abrazaba y me decía al oído, eres un peluche que huele a semen. Me restregué con ella, estaba bien mojada, pero ella se aparto y me dijo.

-Me pone mucho follarte, pero me pone más dejarte con las ganas.

Ya sé que os dije que para semana santa no escribiría, pero me he inspirado jaja. COMENTAD por favor.